
Anoche a las tres de la madrugada Guill me despertó susurrando: "Despiértate que hay un tipo en el estacionamiento". Me levanté de la cama con todo el estrés y el susto del mundo, rezándole a Dios por que nada le hubiese pasado a mi carrito. Mientras, Guill se vestía para bajar con bate en mano a embestir al malechor.
Cuando bajó, el sin familia se escondió pero Guill alcanzó a verlo y empezó a corretearlo con el bate. En el interín yo vigilaba desde la ventana de la cocina que da al estacionamiento y gritaba para que los vecinos bajaran. Al cabo de cinco minutos, cuatro hombres y la conserje estaban con Guillermo pero no se pudo atrapar al desgraciado que logró safarse, eso sí, con un batazo en las costillas y se escabulló sin pena ni gloria.
Los cinco hombres fueron en una camioneta a buscarlo sin ningún resultado. Dos policías en una moto pasaron y tampoco encontraron al individuo. Lo cierto es que por lo menos Guill logró que el malandro no robara a nadie porque bajó a tiempo; pero la impotencia es mucha. La rabia de pensar que en ese estacionamiento hay como 30 carros y sólo éramos ocho los preocupados es inaudito. Ningún miembro de la Junta de Condominio apareció ni a preguntar. Soluciones ninguna, incertidumbre a flor de piel.
Pero lo bueno de todo esto es que mi héroe se convirtió en el héroe del edificio.
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*héroe
3 comentarios:
¿Quieren participación popular? Bueno, la próxima vez no persigan al choro con el bate: rompan el vidrio de uno de esos 30 carros de un batazo y verán cómo baja todo el edificio. Porque pareciera que los vecinos son los verdaderos enemigos y no los ladrones.
¡No sabes la impotencia que siento ante esas cosas! Y uno, de gafo, pensando que la comunidad debe estar unida para protegerse, y hasta expone su vida por el bien común... y el resto del edificio durmiendo o mandándote a callar.
Ojo: sé que uno debe defender su propiedad, pero mucho cuidado con eso de estar tomando la justicia en sus manos... si el enfrentamiento es uno a uno, por más que uno tenga un bate hay que considerar que los malandros encima de malos pueden estar armados. Si la situación fuera distinta y los demás vecinos colaboraran, no habría problema, pero si nadie los apoya ponen en riesgo sus vidas.
Cuando nos pasó a nosotros, sólo se nos ocurrió pegar papelitos en los ascensores echando el cuento y hablando de la seguridad, para ver si alguien se conmovía. No es mucho y a veces no pasa de ser el cuento del momento, pero al menos no nos quedamos tan llenos de rabia como estábamos...
Que de pinga que por lo menos le partio un par de costillitas al malnacido!
es verdad lo que dice Super, a veces tu peor enemigo lo tienes al lado, recuerdo que alla en los palos grandes, la unica forma de reforzar la seguridad en el edificio, era que los del PH les hicieran danio, de lo contrario, si me robaban a mi o algun vecino, la verdad importaba poco.
viva el heroe!
Sí, realmente fue un riesgo pero uno siente la cosquillita por dentro de una victoria estúpida y momentánea. Fue un riesgo innecesario pero que el momento valió la pena y Guill bajó "jugándosela" como él mismo dice, pero coño pana, basta de que nos jodan el carro. A mí realmente no me importan los demás pero un vidrio nuevo mensual no tiene sentido.
Y los vecinos, fuck off!!!
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